En el verano de 2002, Tim Bransfield lo tenía todo. Acababa de graduarse en la escuela secundaria Masconomet en Topsfield, Massachusetts, donde era la estrella de su equipo de béisbol. Estaba a semanas de comenzar una nueva vida en la universidad. Entonces Tim estrelló el auto de su madre contra un árbol a ochenta millas por hora y, como dice en su libro, "todo se oscureció". Tim pasó los siguientes sesenta días en estado de coma, despertando para darse cuenta de que su mundo cambiado para siempre
La lesión cerebral traumática que Tim sufrió como resultado de su accidente automovilístico no fue única. Pero el coraje y el impulso de Tim para superar la adversidad sí lo es. Tim transmite lo que era ser popular y admirado, solo para ver a tantos de sus supuestos amigos (y su novia) desaparecer como resultado de los síntomas y discapacidades de su accidente. Él experimentó
sentimientos profundos de aislamiento, soledad y depresión, y comparte con sus lectores las cosas que lo motivaron a continuar levantándose por las mañanas, incluido su amor por el béisbol y su deseo de asistir a la universidad. Habla de la forma en que su madre era su gracia salvadora, junto con los amigos que se quedaron con él, su perro y su fe en Dios.
En octubre de 2003, Tim comenzó a trabajar conmigo en el área de neurofeedback. Tenía problemas graves con la memoria a corto y largo plazo; al principio, no pudo decirle lo que desayunó ese día. En el transcurso de nuestro trabajo de neurofeedback, Tim hizo un gran progreso. Pero había grandes pedazos de su memoria que estaban permanentemente perdidos, o eso creía yo.
Como escribí en mi introducción al libro de Tim, siempre me enseñaron a creer que cuando una persona tiene pérdida severa de memoria debido a un trauma, cualquier nueva información que entre durante el accidente y en las primeras etapas de la recuperación no será permanente. registrado en el cerebro Pero a través de Tim, descubrí que lo que había sido entrenado para creer no era cierto. Hubo un evento que sucedió en mi oficina que cambió todo, un momento en que Tim se refirió a alguien de mi equipo a quien había conocido muchas veces, pero que nunca antes había podido recordar. Con el trabajo continuo, Tim pudo recordar todo lo que le había sucedido desde el accidente. A través de Tim, descubrí que todas las células de nuestro cuerpo registran todas nuestras experiencias, y con el estímulo correcto, los recuerdos perdidos se pueden recuperar.
Si sufrió una lesión cerebral y está buscando esperanza, coraje, inspiración y motivación, le recomiendo el libro de Tim.
El libro de Tim Una vida interrumpida: la historia de Tim Bransfield se puede comprar en su sitio web.
-Dr. Diane