El caso para buscar consuelo cibernético
Un nuevo estudio de la Universidad de Chicago encontró que los medios sociales-Facebook y Twitter-son "más adictivos que los cigarrillos o el alcohol". Como maestra, padre y (desvergonzadamente entusiasta) usuario de la mediana edad de las redes sociales, me sentí obligado a determinar si soy un adicto
Demasiado tarde para participar en el estudio de U of C, pero no demasiado tarde para realizar una prueba en línea. (Una característica de los mediadores sociales es que AMAMOS cualquier cosa interactiva, como, por ejemplo, una prueba en línea).
¡Aparentemente, soy un 67% adicto a Facebook!
¿Por qué? ¿Por qué tanta gente de mediana edad revigoriza sus vidas y redes sociales a través de las redes sociales? Compartiré un momento comunitario reciente de Facebook que tuve que demuestra los poderes curativos y saludables de mi adicción.
El caso de la adicción
Mi querido perro de 14 años, Bernie, estaba enfermo, el tipo de enfermedad que el veterinario estaba diciendo esas horribles y horribles cosas que los veterinarios dicen cuando es el momento. Ese perro sobrevivió a mi matrimonio. ¿Cómo podríamos dejarlo ir?
Actualización de estado de Facebook: ¿un grito de ayuda?
Buscando, tal vez consuelo, consejo, algo … Me senté, abrí mi página de Facebook y escribí una oración triste sobre mi perro, una frase llamada "actualización de estado" en Facebook, y presioné "Enter".
En cuestión de segundos mi triste frase se publicó en mi página de Facebook.
En segundos, amables respuestas comenzaron a volar a mi página como palomitas de maíz. Amigos de la escuela primaria que comparten historias de sus queridos perros viejos. Colegas que ofrecen fotos de sus perros pasados de moda, y útiles ensayos sobre dejarlo ir. Amigos de la universidad y amigos de la escuela secundaria gritan palabras de apoyo, amabilidad, empatía y comprensión. Incluso mis estudiantes enviaron notas, preguntándose si la clase fue cancelada. (Es broma, o jajaja, reírse a carcajadas como dicen los niños en el texto).
Entonces mi teléfono comienza a explotar. Miembros de la familia y amigos que llaman y envían mensajes de texto preguntándose si estoy bien, si quiero actualizaciones, necesito ayuda, necesito compañía, pueden venir al veterinario conmigo. Y ahí está. Estado de publicación, aldea llega.
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